Por Juan Pablo Guzmán
Presidente de Vertebral
En las últimas horas se ha hecho pública la intención de ampliar el beneficio de gratuidad para aquellos ‘estudiantes universitarios’ que se hayan atrasado un año en completar sus estudios. Esto, a través de una nueva glosa presupuestaria presentada por el Ejecutivo que establece que los excedentes acumulados en el Fondo Solidario de Crédito Universitario serán destinados exclusivamente ‘para el financiamiento de las obligaciones derivadas de los estudiantes que hayan excedido la duración formal de sus carreras hasta en un año’.
Como Consejo de Rectores de Institutos Profesionales y Centros de Formación Técnica Acreditados, Vertebral, hemos sido enfáticos en plantear la urgente necesidad de revisar la normativa vigente e introducir cambios conducentes a perfeccionar el beneficio de la gratuidad, el que, no olvidemos, busca ayudar de forma directa a los alumnos más vulnerables del sistema. Sin embargo, lamentamos que esta iniciativa se oriente solo a los estudiantes universitarios y nuevamente olvide a los alumnos de la Educación Superior Técnico Profesional.
A diferencia de los universitarios, gran parte de ellos trabaja y estudia, son padres y madres de familia o el principal sustento de sus hogares, responsabilidades que naturalmente los exponen aún más a la posibilidad de atrasarse en alcanzar la titulación. Esta realidad no es reconocida por la ley vigente y tampoco se subsana con la nueva glosa presupuestaria al considerar exclusivamente la realidad universitaria. Junto con reconocer este avance, hacemos un llamado a no discriminar a los alumnos de la educación superior técnico-profesional, y también considerarlos en esta ampliación de la gratuidad. Ellos tienen merecimientos de sobra y son quienes más lo necesitan.
Fuente: Diario El Mercurio