Una semana de educación web: Asistencia es alta, pero evaluaciones son un desafío
Ministro Raúl Figueroa afirma que cuando se vuelva a las aulas se deberá nivelar. En universidades, en tanto, cifras de convocatoria y virtualización de clases rondan el 90%.
La situación es inédita: esta semana, por primera vez, el sistema escolar y universitario saltó a la web casi en su totalidad. ¿El motivo? De fuerza mayor: la pandemia del coronavirus.
A los colegios el Mineduc dio acceso a Google Classroom —plataforma donde profesores se pueden comunicar con sus alumnos— y dispuso el sitio ‘Aprendo en línea’, con los textos escolares y material complementario. Al jueves ya habían ingresado más de 1,4 millones de usuarios; en total, hay más de tres millones de escolares.
El peak de conexiones fue el miércoles, cuando 445 mil personas entraron. La mayoría lo hace desde un dispositivo móvil (64%) y el curso más visitado es Lenguaje de 1º básico, que ya ha recibido casi 100 mil visitas.
El ministro de Educación, Raúl Figueroa, considera que la evaluación es ‘positiva, considerando las dificultades’.
Pero entre los padres hay inquietudes. Se preguntan, por ejemplo, cómo se medirán los avances.
Figueroa señala que el énfasis está en ‘que, durante el periodo de suspensión, los aprendizajes no se dejen de lado. El mecanismo de evaluación va a depender fundamentalmente de la forma en que, una vez que se vuelva a clases (presenciales), cada establecimiento lo determine’. En ese sentido, dice que ‘habrá que tomar medidas para asegurar una debida nivelación’.
Cada colegio ha buscado sus propias fórmulas. En Santiago, el Liceo 1 Javiera Carrera estrenó un aula virtual con contenido propio, mientras que el Bradford School optó por la plataforma Edmodo.
En tanto, los liceos Sofofa —técnico-profesionales y que suman más de tres mil jóvenes— utilizan todas las herramientas de Google. El jueves probaron haciendo consejos de curso online: la tasa de conexión fue de entre 60% y 85%.
Una apoderada del colegio Santa María de Lo Cañas cuenta que su hijo tampoco tendrá pruebas durante este periodo: solo una evaluación formativa. ‘Me parece bien que sea sin nota, pero sí me preocupa qué va a pasar en adelante’, dice.
Educación superior
Varias universidades ya pusieron en marcha clases online y sus primeros balances son alentadores. La U. del Desarrollo asegura que tuvo un promedio de asistencia de 86% y al martes cifraba en 94% las clases hechas en la web. El rector, Federico Valdés, impartió a Concepción el ramo que hace en Ingeniería Comercial: tuvo 100% de asistencia. Lo mismo pasó en otras carreras, como Medicina.
‘Cuando profesor y alumnos aprenden a usar las plataformas, resulta muy bien. Es inevitable pensar que, en el futuro, independientemente de las condiciones, va a haber mucho más de esto’, dice el académico.
En la U. Adolfo Ibáñez, el 95% de clases se había hecho de forma virtual. Javier Bronfmann, profesor de la Escuela de Gobierno, reconoce que el cambio obliga a repensar las evaluaciones, y desde ya piensa reemplazar las pruebas con ensayos. Fermín Soroya, alumno de Ingeniería Comercial, cuenta que se concentra tanto como si estuviera en la U: ha tenido clases de ramos matemáticos en línea y dice que lo hace igual que siempre, tomando apuntes en su cuaderno.
En la Universidad Católica, Luz Montero, directora de educación online, estima en torno a 27 mil las personas que, al menos al miércoles, se habían conectado a la plataforma Canvas. En la U. Andrés Bello, en tanto, afirman que más del 88% de los cursos se está impartiendo online y que han hecho más de 8.200 videoconferencias.
El Mineduc se reunió con universidades esta semana y acordó un convenio para que algunas compartan su experiencia con los planteles que han utilizado menos estas herramientas. Además, capacitarán a los profesores de dichas casas de estudios.
‘Esta contingencia es una oportunidad para el sistema de educación superior, en términos de poder incorporar la innovación y las nuevas tecnologías’, destaca Gonzalo Tomarelli, rector de Iplacex y secretario general de Vertebral, uno de los directivos que han participado en las coordinaciones.
Fuente: El Mercurio
